Wednesday, December 1, 2021

Tlahtol Macehualli: El Engaño de Derechos Delegados

Comités de Defensa del Barrio
Press Release
 

Phoenix, Áztlan

"Donde vive el espíritu de la Verdad"



Otra vez la reforma migratoria es el espejismo de la política. Es la carta marcada del póker político entre demócratas y republicanos. Es la esperanza de millones de almas perdidas entre fronteras falsas puestas como trampas para los pueblos originales atrapados entre el presente, pasado, y futuro de las generaciones sufriendo una pandemia constante y variante de fiebre capitalista. 
 
Primero se llamaba Simpson Rodino, después se llamaba Simpson Mazzoli, dependiendo de los legisladores que promovían la reforma migratoria. Después bajo Ronald Reagan se llamaba IRCA86 por el año que fue implementada. Esa ultima legalizo un par de millones de las almas perdidas en el limbo de la ilegalidad inventada por invasores sin derecho natural a estos territorios. Siempre a cambio de mas persecución, siempre a cambio de mas deportaciones de los descendientes originarios de estos territorios.

 

Al pasar del tiempo el virus se intensifico y dejo la ilusión de la legalización. Comenzó atacar convirtiendo a los policías locales en variantes de la patrulla fronteriza con acuerdos como el 287g, y sus variantes como la del Sheriff Penzone en la cárcel de la cuarta avenida multiplicada a nivel nacional.


Los pueblos originales apodados salvajes, indocumentados, ilegales, wetbacks, (espaldas mojadas) es la ficha que continua en la mesa política, pero no para legalizar lo que no es ilegal, sino para mantener la ilusión de millones de trabajadores desechables, y para seguir castigándolos en una especie de tortura psicológica donde no pueden ni tener ni voz ni voto en el juego de póker en el burdel llamado Democracia.

Allí los juegos de azar siempre los ganan los dueños del Casino y los que jalan la palanca de la maquinaria del dinero vuelven sin un centavo en la bolsa, apilados en perreras después de pagar su tiempo en un purgatorio localizado en cualquier ciudad del mundo, antes de ser vueltos al infierno del narcotráfico y ser traficados en las maquilas, las huertas, las cantinas que existen desde la Patagonia hasta Alaska.

       


Parece que en el barajeo de las cartas en el juego en turno los “soñadores” quedaran fuera, los TPS’ianos se pueden olvidar de una legalización, los trabajadores “esenciales” posiblemente les den permisos temporales de cinco años, pero sin ninguna garantía. “Taxation without representation is tyranny” gritaron los invasores cuando querían independizarse de la Colonia Inglesa para formar su propio Casino. Sin embargo, ahora “Impuestos Sin Representación” es la formula por la que se rige estados unidos.

Ahora la tiranía se ejerce sobre los seres humanos originarios de este continente con la firmeza de leyes impuestas por los casinos políticos que nunca pierden y que tampoco les importa si las almas estafadas por cinco siglos viven, mueren, o se pudren en la pobreza y en las drogas fomentadas por ellos mismos para neutralizar las mentes de cualquier idea o ímpetu de liberación.


Sin embargo, ingresar a la elite política es el sueño de todo estudiante para mejorar las condiciones de su pueblo, de su familia, de sus futuros hijos. Es como entrar a las mafias del narcotráfico para luchar contra la droga adicción. Es un callejón sin salida donde solo llegaran a ser “dealers” en la mesa de cartas.




Asalariados al servicio de un sistema que seguirá chupando el sudor de nuestra frente en los campos agrícolas, en las fabricas, en los hoteles, en los burdeles, en cada rincón donde trabajamos. ¿Acaso hay alguien que pueda pensar y organizar afuera de la ilusión de que si votamos podemos cambiar las cosas?

Desde los 50’s bajo el programa bracero, hasta hoy seguimos siendo engañados. Ya es hora de deportar el engaño de nuestro ser.

Salvador Reza