“Y sin embargo,
pienso que el hombre nunca renunciara al verdadero sufrimiento, eso es, La
destrucción y el caos.”
Fyodor Dostoyevsky, Notes from Underground Chapter 9.Con estas palabras del gran escritor ruso podemos encapsular la Caravana Migrante principalmente de Honduras pero que abarca el mundo entero. Vemos los éxodos de Siria, de África, del sur del continente por las crisis manufacturadas por las grandes empresas capitalistas en su fiebre de minerales insaciable.
Estados Unidos
tampoco se había salvado pero la enmascaraba con reforma migratorias que no
alcanzaban a saciar el antiguo instinto de los seres humanos de caminar por
nuestra madre tierra en busca de mejores lugares donde cazar, sembrar, por
generaciones milenarias. Antes de ser sedentarios nuestros antepasados eran
nómadas que migraban de la misma manera que el Caribou, el Búfalo, antes que se
inventara el cerco de púas.
Sin embargo, a
pesar de nuestro instinto ancestral de migrantes incansables hoy en día las
migraciones son manufacturadas por entidades político-corporativas con
intereses turbios en su insaciable sed de riquezas. Desplazan poblaciones para
apoderarse del subsuelo, para construir presas hidroeléctricas para esas
inversiones mineras o de agricultura de exportación, para saciar el hambre de
minerales de los países desarrollados económicamente, a costa de los pueblos.
Eso lo hemos
visto con los asesinatos de Berta Cáceres en Honduras y muchos representantes de pueblos
originales que defienden su territorio de corporaciones mineras desde Colombia,
Brasil, Bolivia, México, Estados Unidos, y Canadá. Y que pasa después del
desplazamiento forzado de las comunidades, los pueblos migran a las ciudades
repletas de caos y destrucción física, emocional, cultural, moral, donde reina
la ley de los narcos traficantes políticos que prostituyen, violan, y seducen a
la juventud.
Ante esta
situación, una administración corrupta como la de Donald Trump, al servicio del
complejo corporativo narco industrial, fabrica una crisis apoyado por los
mismos gobiernos de Honduras y México con fines políticos de salvar su control político
en el congreso de estados unidos. Las condiciones del éxodo están dadas. Solo
se necesitaba un cerillo para comenzar el incendio. “Vamos en caravana pa’l
norte, sumase a la búsqueda de la felicidad.”
Con el caos
desatado ahora Donald Trump justifica la militarización total de la frontera.
La represión abierta del migrante. Pero mas que todo convierte al pueblo
mexicano en su aliado en contra de los “invasores” ilegales a través de la
manipulación de las noticias y el cyber space. Le dan una lección a Rusia en el
uso de FaceBook para voltear a los mexicanos, un pueblo migrante en aliados
anti-migrantes. Y aun si estados unidos recibe un millón de migrantes sin
papeles al año con visas de turista y a través de la frontera falsa. El
espectáculo de 5,000 refugiados en las calles de Tijuana es suficiente para
invadir a México con gases lacrimógenos y balas de gomas.
Salvador Reza
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