Comités de Defensa del Barrio
Press Release

Para entender la guerra se tiene que estudiar el patriotismo, el nacionalismo, sin dejar a un lado el egoísmo. Algunos de mis “amigos” se ofenden porque no me uno al coro patriótico pidiendo solamente la condenación de Rusia por su invasión a Ucrania. La guerra es llegar a la enajenación total como ser humano. Matar a tu próximo legalmente independientemente del lado que defiendas y con la bendición de la santa madre iglesia es el peor crimen contra la humanidad entera.

Y no, no me uno a condenar solamente a Rusia y Putin, se tiene que condenar a todos los presidentes, primeros ministros, y todas las Naciones supuestamente Unidas.

Todas las naciones adoctrinan a los niños desde su mas tierna edad con himnos nacionales, “mexicanos al grito de guerra,” estados unidos “las bombas explotando en el aire dio prueba a través de la noche que nuestra bandera todavía estaba allí,” Rusia “Lealtad a nuestra patria amada nos da fuerza,” Ucrania “Nuestras almas y cuerpo daremos por nuestro país,” y así sucesivamente por el mundo entero se programa a los niños, cuando todavía no tienen habilidad de analizar, en un patriotismo ciego que se puede evocar en aquel momento que las clases en el poder necesiten soldados para defender intereses ajenos a los del pueblo.

Es una especie de programación hipnótica que se puede utilizar para levantar ejércitos, enviarlos a tierras lejanas donde no hablan ni el idioma, ni conocen las costumbres, pero van a pelear en contra del comunismo, el dictador, el déspota, el pagano. Una vez hice un experimento donde agarré dos banderitas, una norteamericana y otra mexicana. Hice como que iba pisar la bandera norteamericana y una clase de mexicanos aprendiendo ingles aplaudieron y les dio gusto.

Luego cambié los papeles e hice lo mismo con la mexicana. Los estudiantes se pusieron serios y algunos hasta se enojaron conmigo, casi me querían golpear. Les explique que así trabaja el patriotismo y como se utiliza para tener una cantidad de cuerpos dispuestos a defender los intereses corporativos. Les conté como los Magonistas, (seguidores de Flores Magón) pisoteaban la bandera en mítines durante la revolución mexicana y tenían que salir huyendo porque los mismos revolucionarios que peleaban con Villa o Zapata, que gritaban “Tierra y Libertad,” estaban dispuestos a matarlos por un trapo pintado al que les enseñaron a respetar, amar, y dar la vida desde su mas tierna edad.

El patriotismo a través de los símbolos patrios es integrado al ego individual donde “un soldado en cada hijo te dio.” Un insulto a la bandera, al país, ya no es algo abstracto, es algo personal por el cual Vladimir, Juan, Hanz, Robert, Danny, esta dispuesto a dar la vida. Al soldado raso ruso lo mueve su bandera, su amor a la patria, al ucranio lo motiva la defensa de su bandera, su nación.

Las razones verdaderas de la guerra no importan.

Que es una guerra por el control del petróleo no importa, es mas ni siquiera lo saben la mayoría de los reclutas. Durante la guerra de Afganistán los soldados norteamericanos no sabían ni siquiera que estaban disputándose el control de los minerales de las montañas, el mercado del opio, ellos solo sabían que fueron a buscar a Osama Bin Laden, y después que peleaban por traer “democracia.” Pero en el fondo ellos peleaban por la bandera y el orgullo nacional de estados unidos.

Algunos preguntaran que ¿porque digo esto? Porque yo también fui parte de la fuerza aérea norteamericana. Porque yo también en un tiempo creí que estaba allí defendiendo la libertad, la democracia y la justicia.

Hasta que me di cuenta solo éramos ejércitos de ocupación para mantener el flujo del petróleo del medio oriente para las grandes trasnacionales. Espero que esta guerra no se transforme en una guerra mundial nuclear inculcada por patriotismos infundados, patriotismos convertidos en cuerpos calcinados por las bombas nucleares.

Salvador Reza